Daniel Serrano Palacios destaca propuestas de seguridad y rescate en Cuautitlán Izcalli

  • El candidato de la coalición “Sigamos Haciendo Historia en el Estado de México” se reúne con vecinos para compartir sus planes para el municipio

Izcalli, Méx.- Este miércoles, vecinos de la Unidad Habitacional Consorcio y de las colonias La Presita y Bosques de la Hacienda 1ª Sección recibieron a Daniel Serrano Palacios, candidato a la presidencia municipal de Cuautitlán Izcalli por la coalición “Sigamos Haciendo Historia en el Estado de México”. Durante su encuentro con estas comunidades, Serrano Palacios enfatizó en la importancia de fortalecer la seguridad ciudadana y el rescate de las unidades habitacionales.

«Vamos a cambiar el modelo de seguridad. Actualmente, el municipio se recorre a través de porciones muy grandes de territorio que se denominan sectores. Ahora, vamos a pasar de 8 sectores a tener 123 cuadrantes», explicó Serrano Palacios a habitantes de la colonia La Presita, sobre su propuesta de policía de proximidad.

El candidato detalló que se implementará una aplicación de botón de pánico, que permitirá a los ciudadanos solicitar asistencia policial. Además, anunció que tanto las patrullas como los chalecos de los agentes contarán con cámaras de grabación para monitorear las interacciones de los oficiales.

En su visita a la Unidad Habitacional Consorcio, Serrano Palacios expuso la necesidad de implementar un plan de rescate a las unidades habitacionales: «Habrá un programa especial para ayudar a atender las unidades».

Explicó que el programa tendrá un presupuesto participativo, «una herramienta que es usada en muchas otras ciudades y que implica generar una asamblea, un mecanismo y una votación para que la ciudadanía vaya jerarquizando las necesidades y habrá una parte del presupuesto que se va a ejecutar por la ciudadanía».

Sobre la posibilidad de realizar un debate, señaló que siempre estará dispuesto a participar, sin embargo, es importante que los medios de comunicación implicados no se encuentren presionados por agentes externos. «Convocar a un debate debería ser un ejercicio de absoluta libertad, donde al árbitro del partido no le estén apuntando desde la tribuna, porque entonces puede sentirse presionado para inclinarse hacia algún lado», apuntó.

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